Santander: se frena en el sitio
Santander es otro de esos valores bajistas desde 2007 que con la crisis Covid-19 vivió un desplome y que ha rebotado con gran fuerza desde los mínimos de septiembre. Sin embargo, a pesar de la virulencia del rebote, la debilidad sigue presente y se demuestra en que el gráfico del Santander nos dice que se frena justo en el sitio. Y muy por debajo aún de los niveles pre-Covid.
¿Por qué te digo que se ha frenado justo en el sitio? Porque ante una situación así, la primera zona de resistencia de importancia provoca un parón, si no un giro. Y aquí se ha llegado justo a la zona que marca si todo esto es un pull-back para seguir bajando o no.
Si quieres verlo, continúa leyendo.
Gráfico mensual
Este es el gráfico de largo plazo del Santander. Ahí se veía el tridente bajista rojo desde 1997. La parte alta del tridente ha marcado todos los máximos desde 2007. Nunca se ha podido llegar a esos máximos, porque esa bajista ha frenado cualquier intento en 2010, 2014, 2015, 2017 y 2018. La parte baja marcó los mínimos de finales de 1997, 1998 y 2002.
Te dije que parecía ser el objetivo de la caída de este año. Incluso cuando se rompió la zona de soporte horizontal en la zona de 1,75, mínimos desde 1997, todo apuntaba a ese objetivo. Sin embargo, existía otro tridente bajista de medio plazo desde 2007, el azul. La parte alta del mismo es exactamente la misma que la del rojo. Pero la parte baja venía dada por la paralela trazada por los mínimos de 2009. Y justo el suelo se hizo allí y se rebotó con fuerza.
Pues bien, fíjate dónde se ha llegado en este rebote y dónde estamos viendo que el Santander se frena en el sitio. Porque se ha alcanzado justo la parte central de ese tridente bajista desde 2007. Pero es que, además, se ha alcanzado la que era directriz alcista desde los mínimos de 2012, rota en marzo. Y es, pues, una candidata a marcar lo que podría haber sido un pull-back para seguir bajando. Para añadir más dificultad, estaba la MM20.
Esta es la lucha ahora, y la gran duda. ¿Habrá sido todo un pull-back para seguir bajando? ¿O esto de ahora es una simple corrección a la subida para luego romper por arriba? Pues no tengo una bola de cristal para adivinarlo. Y realmente no es el objetivo, adivinar el futuro, sino operar en función de lo que nos cuenta el gráfico.
Lo que está claro es que el tridente bajista azul marca ahora mismo. Y mientras no se rompa la parte central no podremos pensar en continuación del rebote. Si vemos una señal de giro clara, habrá que pensar en volver a la parte baja del tridente. Si, por el contrario, se rompe la parte central del tridente, el objetivo debería estar en la parte alta del tridente.
Antes habría muchos niveles de importancia, como son la directriz alcista morada desde los mínimos de 2009, también rota en la caída. Luego el nivel de resistencia horizontal rojo en zona de los 3,70. Todo el juego de medias un poco más arriba (MM50, MM100, MM200) sería lo siguiente. Y ya, por último, la parte alta del tridente bajista azul.
Pero todo eso aún es ciencia ficción. Lo primero es ver si la parte central del tridente ha marcado el final de la subida o no. Desde luego lo que vemos es que el Santander se frena en el sitio, y eso es normal, aunque también denota debilidad. El MACD, que estaba cortándose al alza, ahora todavía no lo hace. Y habrá que ver si se logra o no.
Lo mejor es que descendamos un poco de nivel, al gráfico semanal, para ver si tenemos más información.
Gráfico semanal
El gráfico semanal nos muestra cosas muy interesantes también. Lo primero es que vemos que, unido a todo lo que te he señalado en el gráfico mensual, resulta que la subida se ha frenado al llegar a la parte alta de un nuevo tridente bajista, en esta ocasión el que viene desde mayo. Demasiados niveles juntos para poder con ellos, al menos a la primera.
Además, tenemos el gap bajista de la semana del 9 de marzo. Se ha llegado prácticamente al máximo de la vela post-hueco, pero no se ha sido capaz de meterse dentro de él para intentar cerrarlo. Era el momento de los alcistas para haber dejado un hueco alcista ahí y dejar una isla. Pero qué va, todo lo contrario.
Lo bueno es que no tenemos una señal de giro bajista, porque aunque la vela de esta semana es roja con cuerpo grande, no hay un reversal, al no haberse hecho esta semana un nuevo máximo. Esto implica que tampoco tengamos una vela realmente de giro como podría haber sido una cobertura de nube oscura.
Tampoco se ha cortado aún a la baja el MACD ni hay divergencias bajistas. Y esto parece decir que aún no está todo el pescado vendido para los alcistas. Eso sí, el tridente bajista marca. Y mientras no se rompa, hay que ser muy cautos con los largos. Más aún cuando la tendencia de largo plazo sigue siendo abrumadoramente bajista.
Veremos lo que ocurre. Pero, de momento, la situación es esta: El Santander se frena en el sitio. Si hay un segundo ataque habrá que ver si rompe o no. Y si no hay un segundo ataque, habrá que pensar en que la tendencia vuelve a ser bajista.
Foto de Hectr – Trabajo propio, CC BY-SA 3.0
Responsable: José Carlos Estévez
Finalidad: Envío de análisis diarios
Legitimación: Tu consentimiento
Destinatarios: Tus datos se encuentran alojados en los servidores de MailChimp, ubicados en Estados Unidos y acogida al Privacy Shield
Derechos: Tienes derecho a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos. Consulta la política de privacidad.