Enagás: situación límite
Enagás ha sido uno de los valores alcistas del Ibex durante los últimos años. Tras la crisis subprime, hizo un mínimo en marzo de 2009 y desde entonces su tendencia fue claramente alcista. Pero ya hace unos cuantos años en los que la situación se ha vuelto lateral. Aunque en febrero de 2020 hizo un nuevo máximo histórico, lo cierto es que eso se ha enmarcado en una figura muy peligrosa. Y las últimas caídas están llevando a Enagás a una situación límite.
Vamos a ver los gráficos.
Gráfico mensual
En este gráfico se ve que la subida desde los mínimos de 2009 ha venido marcada por un tridente alcista. Durante los tres primeros años de la subida, ésta se produjo por la parte baja del tridente. Pero cuando en 2013 se superó la clavicular, la tendencia se aceleró siguiendo la parte alta del tridente.
Pero en 2015, tras tocar la parte alta del tridente fue cuando comenzó ese gran período lateral en el que llevamos desde entonces. A partir de entonces, entró en juego también una línea de soporte horizontal en la zona de los 17,30 euros. Esa línea no se ha quebrado en ningún momento y ha frenado las caídas.
Tras romper la clavicular en 2019, esa línea de soporte horizontal paró la caída y llevó a un rebote hasta los máximos de febrero de 2020. Esos máximos históricos significaron el toque en la parte central del tridente. Y desde ahí, hacia abajo.
Los mínimos tras la crisis Covid-19 nos llevaron a la parte baja del tridente. Y aunque la mecha de la vela estuvo por debajo, al cierre se mantuvo. Tanto esa parte baja del tridente como el soporte horizontal, superándolo en la siguiente vela.
El rebote posterior no ha sido capaz de volver a zona de máximos. Y ahora lo que estamos viendo es que se ha vuelto a la parte baja del tridente. En octubre se tocó, para rebotar en noviembre. Pero duró poco y diciembre acabó de nuevo en la parte baja del tridente. Enero se ha mantenido por allí y ahora en febrero se está atacando directamente la parte baja del tridente.
Además, también se está amenazando el soporte horizontal. Y esto significa que Enagás está en situación límite. Si se rompiera tanto la parte baja del tridente como el soporte horizontal, la situación se volvería muy delicada. Y se abrirían las puertas al comienzo de una corrección mayor. Significaría que esa tendencia alcista iniciada en 2009 habría acabado. Aunque el lateral de los últimos años ya lo estaría anunciando. Pero cuando hay un lateral así siempre queda la duda de si es una distribución para finalizar la tendencia o es una corrección antes de romper por arriba. Y de lo que se trata es de esperar por dónde se rompe. Por eso es tan importante la situación ahora. Como se rompa…
Hay algo más aún. Porque podríamos tener, desde 2018 una figura en forma de diamante. Eso podría corresponderse con una diamétrica tras corrección previa. Y eso significaría que la tendencia alcista se ha acabado. La figura se estaría rompiendo ya. Con lo que todo estaría a punto de desencadenarse.
Veremos lo que ocurre. Un soporte lo es hasta que no se rompe. Pero la situación es límite en Enagás. Muy atentos a lo que suceda en los próximos meses. El MACD está claramente cortado a la baja, con pendiente muy negativa y por debajo de cero. Pero ha llegado a la zona de mínimos de 2009. Es otro soporte más a unir a la situación.
Por abajo las referencias estarán en los mínimos de 2020, que coincidía con el 50% de la subida del tramo alcista desde 2009. Pero sería más que posible tener que ir al 61,8%. Y eso significaría tocar el 12,30. Si ahí no se aguanta, habría que mirar los máximos de 2007 por los 10 euros.
Pero lo primero es lo primero. Veremos si llega la sangre al río o no. La zona está clara. Parte baja del tridente y soporte horizontal. Y para romper ya sabes, un cierre de vela mensual por debajo y confirmación en la siguiente.
Foto De Moríñigo – Trabajo propio, CC BY-SA 4.0
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