Todos conocemos la habilidad que tienen los magos para hacer todo tipo de trucos: con las cartas, haciendo desaparecer objetos, sacando conejos de la chistera. Aunque a ellos no les gusta la palabra truco. Ellos simplemente hacen magia.
Magos ha habido muchos a lo largo de la historia, y muy conocidos. Empezando por los Reyes Magos, que, aunque en su momento no practicaron más magia que ir a adorar al niño Jesús tras su nacimiento, hoy sí que la realizan cada noche del 5 de Enero, haciendo realidad los sueños de los niños de muchas partes. Siguiendo por magos tan conocidos como Merlín, consejero del Rey Arturo en Camelot. O ya en la historia más moderna, magos que han sido auténticas estrellas debido principalmente a la televisión: Houdini, Copperfield, David Blaine o los más cercanos a nosotros: Juan Tamariz, el desaparecido Pepe Carroll, el más reciente Jorge Blass o uno de nuestros preferidos, el argentino René Lavand.
Y, si hablamos del terreno de la ficción literaria/cinematográfica, tenemos ejemplos muy claros en los últimos años de magos famosos: Gandalf en el Señor de los Anillos o Harry Potter, a los que hemos visto hacer toda clase de hechizos y encantos en sus películas.
Sin embargo, todos estos magos se han quedado pequeños con las actuaciones estelares del mago Bernanke en los últimos tiempos. Y hoy, el gran mago, el gurú de la economía norteamericana, se ha sacado un conejo de la chistera. Pues sí, aunque los rumores eran insistentes desde ayer en el sentido de que la FED iba a actuar antes de la reunión de la semana que viene, hoy esa actuación estelar se ha producido, con una inyección de liquidez al mercado de 200.000 millones de dólares en una medida coordinada con otros bancos centrales, entre ellos el Banco Central Europeo.
Y esta medida ha sido capaz de desbordar el entusiasmo alcista de las bolsas, aunque la sesión ya había empezado bien gracias al violento giro de los mercados asiáticos esta noche debido a los insistentes rumores de la actuación de la FED. Así, el Nikkei terminó con un alza de un 1% cuando había tenido un inicio de sesión muy bajista.
Y este giro en las bolsas asiáticas, unido a los rumores, hizo que la sesión se iniciara al alza. Además, el dato del indicador ZEW alemán bajaba menos de lo esperado, con lo que las alzas se fueron acrecentando. Hasta que apareció el mago Bernanke e hizo su truco de magia. Entonces la explosión alcista fue brutal.
Cabe reseñar que ayer ya decíamos que los índices estaban muy cerca de soportes importantísimos, como eran los mínimos de Enero. Así, el Euro Stoxx 50 ya había tocado ayer esos mínimos y había rebotado desde ellos. El futuro del Dax estuvo muy cerca y nos dejó una vela en forma de martillo invertido, tal y como dijimos ayer. Y el Dow Jones estaba a menos de 100 puntos de esos mínimos. Y, casualmente, en estos niveles la FED actuó.
Pues bien, ayer decíamos también que el Ibex era el índice que más apartado estaba de esos mínimos, yendo por libre como en muchas ocasiones. Pero que se encontraba sin perder el 61,8% de Fibonacci de la subida desde mínimos de Enero, lo que era importante. Y, aunque el cierre de los americanos ayer no presagiaba nada bueno, la actuación de la FED lo ha cambiado todo. Y el Ibex se ha comportado aún mejor que el resto de los índices europeos, con una subida por encima del 3%.
Esto nos ha llevado a un cierre en el que nos hemos quedado a las puertas de romper la importante resistencia dejada el día 3 de Marzo con la pauta de la ventana bajista que nos quedó entonces. Además, también nos hemos quedado a las puertas de romper la directriz bajista desde Diciembre. Y, encima, nos hemos quedado justo en el 50% de Fibonacci de la caída desde el 27 de Febrero hasta ayer.
Daba la sensación de que, a pesar de lo importante de las subidas, el índice no se atrevía a romper, debido a que estábamos muy acelerados con respecto al resto de los índices y a que había que esperar a ver cómo cerraba la sesión de los americanos. No fuera que rompiéramos, la subida fuera muy vertical y los americanos tuvieran un cierre malo y mañana nos desplomáramos.
Sin embargo, los americanos han cerrado con alzas muy importantes, un 3,55% en el Dow Jones y un 4,06% en el Nasdaq 100. Y lo que es más importante, por encima de la resistencia de los 12.040 y por encima del 38,2% de Fibonacci de la caída desde el 27 de Febrero en el Dow Jones, dejándonos una soberbia vela en forma de Marubozu blanco.
Por tanto, y aunque el Ibex se ha quedado en las puertas de una resistencia muy importante, el cierre de los americanos adelanta que debemos abrir al alza y continuar con el rebote. Si rompemos el nivel de los 13.055, el siguiente nivel de resistencia está en los entornos de los 13.170. Y si ese nivel se rompe, pondremos el ojo, de nuevo, en los 13.500 y en los 13.650. Y allí veremos cómo se comporta el Ibex de nuevo. Vale todo lo dicho en las anteriores veces que hemos estado cerca.
Por abajo, pues tenemos, en primer lugar, los 13.000. Y, como punto más importante por abajo, los 12.720 de nuevo y luego los 12.580. Pero con estas actuaciones de magia de Ben Bernanke, todo es posible.
Eso sí, el mago se está quedando ya sin trucos, y su margen de actuación es muy reducido. La semana que viene deberá actuar de nuevo, y lo más probable es que vuelva a bajar los tipos de interés, esperando el mercado una nueva dosis de droga en forma de 0,75 puntos de bajada. Incluso hay muchos que esperan una bajada de un punto en los tipos de interés. Pero, es posible que, una vez que esta actuación se produzca, el mercado vuelva a bajar debido a que la crisis sigue totalmente vigente, y nos preguntamos si estos trucos de magia no son otra cosa que «pan para hoy y hambre para mañana».
Pero, mientras esto no ocurra y siga la fiebre alcista debida a la actuación de hoy de la FED, deberemos aprovecharlo. Eso sí, con cautela, no sea que en los próximos días salga algún otro rumor en forma de problemas para algún banco, de rebaja del rating de una aseguradora de rating, en forma de que el petróleo siga escalando de precio o en forma de que algún nuevo dato de la economía americana nos vuelva a llevar a la realidad.
Por tanto, mucha atención a los niveles antes expuestos y a las noticias que vayamos recibiendo. La crisis sigue y aunque la FED está poniendo toda la carne en el asador, es de esperar que dicha crisis sea larga. De hecho, todavía no hemos podido certificar oficialmente la recesión en Estados Unidos, ya que el PIB no ha bajado aún ningún trimestre. Por ello, aprovechemos estos momentos pero con mucha cautela.