Ante el cariz que han tomado los acontecimientos, con una semana en la que los desplomes diarios han estado a la orden del día, para finalizar el viernes con un desplome del Ibex por encima del 9%, récord histórico del índice, vamos hoy a intentar establecer el escenario en el que estamos y cuáles pueden ser los próximos movimientos del Ibex.
Para ello, vamos a utilizar la teoría de las Ondas de Elliott, además del resto de técnicas de análisis técnico que usamos habitualmente. Así, vamos a iniciar el escenario un poco antes de que a finales del año pasado se hiciera un doble techo en los entornos de los 16.000 que anticipaba el final del ciclo alcista.
Podemos ver como por el mes de Junio de 2007 se formó una directriz bajista de soporte que se tocó 3 veces antes de iniciarse un nuevo impulso alcista hasta llegar al doble techo de los 16.000. Esta directriz es muy importante, ya que se volvió a tocar en los mínimos de Enero, rebotándose en ella. Y el viernes hemos vuelto a tocarla de nuevo.
Además, lo realmente importante es que podemos trazar un canal descendente perfecto que tendría una directriz superior de resistencia que se tocó en el segundo pico del doble techo, allá por el mes de Diciembre y en los máximos del mes de Mayo de este año. Como decimos, se trata de un perfecto canal bajista hasta ahora.
Bien, incorporemos en este punto la teoría de las Ondas de Elliott. Con el doble techo de Diciembre se dio por concluido el ciclo alcista anterior y comenzó uno bajista. Como sabemos, el impulso bajista debe formarse por 5 ondas de la pauta de impulso más las 3 de la pauta correctiva.
La teoría de Elliott tiene solo tres reglas, que son:
– La onda segunda no puede caer por debajo de la onda primera (si es un impulso ascendente, en caso de ser descendente, la onda segunda no puede subir por encima de la onda primera).
– La onda tercera nunca es la más corta de las ondas 1,3 y 5.
– La cuarta onda nunca se solapa en precio con la onda primera.
Además, existen una serie de guías para ayudarnos a establecer el escenario. Entre ellas, nos vamos a quedar con las siguientes:
– Para que una onda sea comparable con otra debe recorrer un mínimo en precio y tiempo del 38%.
– Con frecuencia las correcciones terminan entre el 38,2% y el 61,8% respecto del impulso anterior. Los niveles de precio y tiempo del 38,2%, 50% y 61,8% son bastante probables, y cuando coincide el mismo retroceso en tiempo y precio suele preceder a un cambio de tendencia.
– Se dibujan líneas de tendencia que sirven de referencia a la evolución del precio. La línea más fiable es la línea 2-4, que une los mínimos de la segunda y de la cuarta onda.
Con estas premisas, nos vamos ya al gráfico, y es entonces cuando vamos a marcar como la onda 1 la que se inició en Diciembre de 2007 en los 15.993,3 y que llegó hasta los 11.943,3 en Enero de este año. Allí se comenzó la onda 2, que llegó hasta los 14.297,9 de Mayo, como vemos, en un nivel entre el 50% y el 61,8% de Fibonacci de la onda 1. Es decir, que cumple la regla de que la onda segunda no puede ascender por encima de la onda primera y, además, la corrección termina por encima del 38,2% de la onda primera y entre ese nivel y el 61,8%.
Es entonces, en Mayo (y justo cuando se toca la parte alta del canal bajista que hemos marcado en el gráfico) cuando se termina la onda 2 correctiva y se inicia la nueva onda de impulso bajista, la onda 3. Esta onda 3 hemos visto que no puede ser la más corta de las 1, 3 y 5. Y ya estamos viendo que no es más corta que la 1, por lo que, de momento, vamos cumpliendo con todas las normas.
Además, las ondas terceras son inconfundibles. Comienzan tímidas, pero concluyen con bombos y platillos… Y no hay más que ver cómo ha ido la semana, siendo noticia en todos los medios de comunicación y con la mayor caída de la historia el viernes.
Pero, vemos que el viernes hemos tocado justo la parte baja del canal bajista que nos está marcando la tendencia de esta pauta bajista. Esto podría indicarnos que la onda 3 ya ha llegado a su finalización o que, como mucho, nos queda una dilación, de tal modo que no perdiéramos la parte baja de este canal bajista o que la perdiéramos en el intradía para luego volvernos dentro.
Así pues, vamos a trabajar con la hipótesis de que la onda 3 está terminada o casi terminada. Si así fuera, entonces tendríamos que ver el comienzo de la onda 4 en breve. Esta onda 4, que implicaría un rebote, nunca debería solaparse con la onda 1, por lo que nunca deberíamos ver en este rebote los 11.943. Pero, como hemos ido viendo, esa onda 4 debería llegar por encima del 38,2% de la onda 3, por lo que, al menos, debería llegar hasta los 10.930,7. Si además nos fijamos en el canal bajista, hemos de esperar que la onda 4 llegue, como mucho, hasta esa parte alta del canal, con lo que podríamos esperar un rebote mínimo hasta esos 10.930,7 y uno máximo, tal vez, hasta niveles aproximados del 50% de Fibonacci de la onda 3, es decir, por los 11.566, de tal modo que esta onda 4 llegara hasta, más o menos, el mes de Diciembre, para luego comenzar con la onda 5 que nos debería llevar más abajo hasta volver a la parte baja del canal bajista.
Este escenario estaría basado en la hipótesis de que la onda 3 ya ha terminado o que está a punto de hacerlo. Puesto que esta onda 3 debe estar formada, a su vez, por 5 subondas, deberíamos aplicar las mismas reglas a estas 5 subondas. Y es aquí donde encontramos las primeras dificultades, en especial para encontrar una onda 2 que corriegiera, al menos, el 38,2% de la onda 1, pero podríamos hacer el desglose que hemos señalado, de tal modo que se pudieran cumplir todas las reglas. Además tendríamos otro canal bajista para esta onda 3 que nos indicaría, también, la finalización de la onda 3 o, como mucho, que esta onda 3 finalizara al cortarse el canal bajista principal del impulso bajista con este canal de la onda 3, lo cual sería a finales de mes.
Por ello, pensamos que la caída tan brutal que estamos viendo estos últimos días, ya ha terminado o estaría a punto de hacerlo, como mucho en los entornos de los 8.500. Esto nos debería llevar a un rebote con la onda 4 que nos llevara hacia los entornos de los 11.000 – 11.500 si el movimiento hubiera terminado ya o hacia los 10.800 – 11.400 si todavía quedara una dilación hasta esos 8.500.
Todo este análisis puede echárnoslo atrás el mercado en los próximos días si no se cumple el escenario previsto, lo que nos llevaría a reiniciar el recuento de las ondas realizado.
Mientras intentamos confirmar nuestro escenario en las próximas sesiones, esperemos que, al menos, la parte baja del canal bajista aguante y no se rompa a la baja. Si esta directriz aguanta, entonces tendríamos más posibilidades de que el escenario previsto sea el correcto.