No recuerdo desde hace cuánto tiempo te vengo diciendo que el Ibex viene marcado por un tridente bajista desde los máximos de 2007. Cada vez que se ha llegado a la parte alta del tridente, y van unas cuántas, llegan las caídas. Y entonces es cuando hay que vigilar la parte central del tridente y, en casos extremos, la baja. En mayo y junio tocamos la parte alta del tridente de nuevo. No se pudo romper, y eso ha llevado a las caídas actuales. Pues bien, estamos en el último reducto para los alcistas. El último soporte antes de pensar en que volvemos a la parte central del tridente. Si se rompe este soporte, tendremos una caída adicional de importancia. Y eso me lleva a decirte que el Ibex está a las puertas del abismo.
Vamos a volver a ver el gráfico para enseñártelo.