Durante la Segunda Guerra Mundial, en la batalla librada en el Norte de África entre las fuerzas del Eje y los Aliados, uno de los momentos más importantes fue la batalla librada por el control de Tobruk.
Tobruk era un lugar estratégico, ya que era el único puerto de importancia en la costa africana entre Trípoli y Alejandría. Además, estaba en un punto clave para cortar las líneas de suministro de las tropas de Rommel si decidía atacar a lo largo de la costa hacia Alejandría y El Cairo.
Es por ello que las fuerzas del Eje, dirigidas por Rommel decidieron asediar la ciudad. El asedio comenzó el 10 de Abril de 1941 y en él tomaron parte diversas unidades tanto alemanas como italianas, principalmente la 5ª División Ligera con elementos de la 15ª División Panzer alemanas y la División Armada Ariete italiana, así como tres unidades de infantería italianas, la Brescia, la Bolonia y la Pavía. Las fuerzas aliadas que defendían la ciudad estaban constituidas principalmente por la 9ª División Australiana.
El plan inicial de Rommel era cercar la ciudad de tal modo que se cortara la carretera que unía la ciudad con El Cairo, cortando así las líneas de suministro aliadas por carretera(aunque podían seguir recibiendo los suministros y refuerzos por el mar). Sin embargo, el asalto se produjo inicialmente por el Oeste, esperando Rommel que pudiera ser suficiente, pero no fue así, y tuvo que volver al plan original.
Los ataques y contraataques se sucedieron, comenzando un asedio de la ciudad que duró varios meses. Los aliados intentaron varias operaciones de contraataque para levantar el sitio, fracasando en primera instancia operaciones como la operación Brevity y la Battleaxe, para en Noviembre de 1941 lanzar la Operación Crusader que consiguió su propósito: liberar Tobruk y hacer retroceder a Rommel.
Antes se había producido el relevo de las fuerzas australianas que defendían Tobruk y que tanto éxito habían tenido en su defensa, principalmente por el uso de defensas y fortificaciones a lo largo del puerto que habían sido construidas por los italianos antes de perder Tobruk, una agresiva táctica de patrullas y raids contra las fuerzas del Eje y el poderío de la artillería de la guarnición.
Sin embargo, aunque Rommel fue obligado a retroceder, en 1942 logró reorganizar sus fuerzas y volver a la carga, contraatacando con éxito, primero en la Batalla de Gazala y luego volviendo al asalto de Tobruk, que cayó, por fin, a las 8:00 del día 22 de Junio de 1942, cuando las tropas aliadas comenzaron a rendirse. Cayeron prisioneros 28000 hombres y Rommel se apodero de 2000 toneladas de gasolina, 5000 toneladas de viveres y casi 2000 vehiculos, ademas del puerto con una planta de destilación de agua. Tras esta victoria, Rommel fue ascendido a Mariscal de Campo.
Hace ya muchos años, en la época del «ordenador» Spectrum, se sacó un juego de estrategia muy bueno (para lo que eran entonces los juegos) llamado Desert Rats que recreaba la Campaña del Norte de África, y en algunos de sus escenarios teníamos el asedio de Tobruk, con las fuerzas implicadas. Los amantes de los juegos de estrategia que ya tengan unos añitos seguro que lo recuerdan.
Como vemos, la conquista de Tobruk por parte de las fuerzas del Eje llevó más de un año, estando la ciudad asediada durante muchos meses. Y ahora mismo estamos viendo como las bolsas están asediando niveles de resistencia muy importantes. Ahora se trata de ver si va a ser un asedio largo como el de Tobruk o si va a ser algo más sencillo. Vista la fortaleza de las resistencias, puede parecer que va a costar romper, pero hay que tener en cuenta que en bolsa no se dispone de tanto tiempo como el que costó tomar Tobruk a las fuerzas de Rommel.
El Dow Jones ha cerrado en las inmediaciones de la resistencia clave de los entornos de los 11.700 puntos, donde confluye el 38,2% de Fibonacci de la caída desde Mayo y los máximos del mes de Julio. Hoy se han tocado casi esos máximos, cerrando ligeramente por debajo, y quedándonos una vela en forma de peonza en el nivel de resistencia, lo que indica las dificultades que están teniendo los alcistas para romper por arriba. Hay que tener en cuenta que la directriz alcista iniciada en los mínimos de Julio no queda muy lejos, y que el triángulo ascendente debe romperse antes de llegar a su vértice. Decimos esto porque no hay mucho tiempo para intentar romper, ya sea por arriba, lo que nos llevaría a proyección de subida de 900 puntos o por abajo. Seguiremos muy atentos al comportamiento del Dow Jones ante esta cota. Si rompe, el siguiente nivel de resistencia lo tendríamos en las cercanías de los 12.000.
El mini SP ha quedado de la misma forma que el Dow Jones, en las inmediaciones de la resistencia de los 1.291, cota que ha llegado a tocar en el intradía. La vela que nos queda hoy es igual a la del Dow Jones, y la figura del triángulo ascendente sigue intacta. Por ello seguiremos a la espera de la rotura de la figura, cosa que no puede llevar mucho tiempo ya.
En cuanto al Dax, cierre hoy en las inmediaciones de los máximos de Julio (en los 6.575) y de la resistencia de los 6.615, correspondiente al 50% de Fibonacci de la caída desde Mayo. Fundamental romper estas resistencias para intentar seguir subiendo. También tenemos la formación de un triángulo ascendente, que debe ser roto a no tardar mucho.
Euro Stoxx es el que más cerca ha estado de romper por arriba, y es que ha cerrado ligeramente por encima de los máximos de Julio, concretamente en los 3.439 puntos, aunque sin lograr romper definitivamente esta resistencia. Ahora mismo estamos en el filtro de superación de los 3.403, correspondientes al 38,2% de fibonacci de la caída desde Mayo. Si logra romperse definitivamente, entonces quedaría activada la figura de HCHi y podríamos ver un rebote de consideración. Atención a la vela que nos ha quedado hoy, un doji lápida en zona de resistencia, lo que puede indicarnos una corrección inmediata si mañana se confirmara esta pauta. Sin embargo, también hay que tener en cuenta que el triángulo ascendente también está muy cerca ya del vértice y no debe tardar mucho en romperse.
Y, por último, el Ibex. El Ibex sigue comportándose peor que el resto de índices, y no ha sido capaz ya no solo de acercarse al 38,2% de Fibonacci de la caída desde Mayo, que está en los 12.220, sino siquiera a los máximos de Julio y a la resistencia clave de los 11.937 – 12.000. Y esto es preocupante, ya que es una muestra clara de debilidad. Y, lo que es peor, si el resto de índices no pueden con las resistencias en las que están ya mismo, se irán para abajo, y el Ibex tendrá muy complicado intentar asaltar sus resistencias claves de corto. Además, la vela de hoy nos deja una pauta de hombre colgado, lo que puede significar el final del rebote y el comienzo de una corrección, sin llegar siquiera a la zona de resistencias. Hay que ver si mañana se confirma. Para ello, mañana debemos ver un cierre por debajo del cuerpo de la vela de hoy (aunque también hay analistas que dicen que es importante que la vela de mañana abra por debajo del cuerpo del hombre colgado de hoy). Lo que extraño es que un hombre colgado suele formarse en zonas de resistencia o en sus inmediaciones, y nuestra resistencia principal está aún algo alejada. Pero hay que tener en cuenta que el resto de índices sí que están en zonas de resistencias, y vista nuestra debilidad, cuando los demás suben, nosotros subimos menos y cuando los demás corrigen, nosotros lo hacemos como los que más… El triángulo ascendente sigue plenamente vigente y hay que esperar a ver por dónde se rompe.
Tal y como hemos visto, estamos en pleno asedio de resistencias de importancia, como importante era Tobruk en las batallas del Norte de África durante la Segunda Guerra Mundial. Ese asedio duró mucho tiempo, y en él hubo ataques y contraataques, llegando a retroceder las fuerzas del Eje, aunque, finalmente, tomaron la ciudad. Esperemos que nosotros consigamos lo mismo y se pueda finalizar con éxito el asedio aunque tengamos algún retroceso antes.
De momento, seguimos muy expectantes ante lo que puedan hacer los índices ante estas resistencias. Si se logra romper, entonces tendremos un rebote de mayor calado. Si no se logra romper en un plazo de tiempo no muy grande, entonces habrá que ir pensando en que volveremos a caer… Eso sí, aunque se produzca un rebote de gran calado (hablamos de 900 puntos en el Dow Jones o 1.000 en el Ibex como mucho), seguimos pensando que tras este rebote continuarán las caídas, y que va a ser complicado que se suba mucho más.
Por ello, si rompemos y se alcanzan nuestros objetivos de subida, será el momento de estar muy atentos para ver cuándo se acaba ese rebote y cerrar nuestras posiciones largas. Si el rebote se prolongara y nuestras previsiones fallaran, ya habría tiempo de volver a abrir largos.
Pero todo esto queda condicionado a que el asedio logra su objetivo de romper los triángulos ascendentes por arriba. Mientras esto no pase, todo son elucubraciones. Lo fundamental es romper las resistencias.